lunes, 12 de enero de 2015

El Diario de Angel. Cap. 4: El Baño

Al volver a casa, Malena me acompaño obviamente por espiar a Angel. Cuando entramos mamá nos esperaba con un rico almuerzo. David salia mas tarde, por lo que solo estábamos nosotros en la casa. Cuando Angel entró la gata fue rápidamente a verlo. Cuando todos nos sentamos a comer la gata subió a las piernas de Angel. Tuvo que comer así, note que Angela miraba demasiado a mi Amiga. En eso Malena pregunta -Angel, vos sabes pelear no? -Si. Respondió Angel. -Hiciste karate o algo asi? Agrega malena. -No, en el lugar donde estaba antes los chicos eran algo revoltosos, por lo que tenia que cuidar mis cosas, entre ellas mi gata. Con esa respuesta estaba por besar a Malena. Necesitaba saber lo que mas pueda sobre Angel.
Cuando terminamos de comer nos levantamos, y antes de eso Angel dijo -Naty, ahora en un rato me voy a bañar. Esta era mi oportunidad para plantarle una cámara en el baño. Con el fin de saber que esconde detrás de su venda, y su ropa. Fui con Malena a mi cuarto y le comente lo que iba a hacer. Ella trepaba por las paredes ansiosa por ver una foto de el sin ropa. Cuando Angel estaba apunto de entrar yo entre, y coloque la cámara del celular sincronizada con la computadora, detrás del inodoro.
Cuando sali, Angel y la gata entraron en el baño. Mientras nosotras espiábamos por la computadora.
La grabación nos mostraba los pies, cuando al sacarse una media veo en la planta de su pie. Un símbolo algo extraño era como un rombo, que adentro tenia una sola letra. Eso me pareció extraño. Al pasar unos segundo la cámara se mueve, cayendo con el lente hacia arriba en eso observe a la gata en primer plaño. La puerta se abre, y la gata entra a mi cuarto con el celular aplastado, como impactado por aplanadoras. Lo deja en el suelo y se sienta justo en la puerta del baño. Malena estaba completamente asustada. -Te dije, esa gata es mas diabólica de lo que te podías imaginar. En eso se escuchan unos pasos de la escalera, era mamá que traía toallas para el baño. La gata se puso arisca cuando mamá quiso entrar. Por lo que mamá toco la puerta. -Si, sos vos Naty pasa! En ese mismo momento la gata se sentó a ver como la observábamos por la puerta entrecerrada. Malena dijo -Hoy me quedo a dormir con vos y te ayudo con esa gata espantosa. -Ok, seguro que podemos, pero la pregunta es otra ¿como?

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